En verano somos conscientes de que debemos proteger nuestra piel de la exposición solar. Y nuestros ojos, ¿debemos protegerlos del sol? La respuesta es sí. Al igual que protegemos la piel también debemos proteger nuestros ojos de los efectos nocivos de la radiación solar.
¿Por qué debemos proteger los ojos del sol?
El sol es beneficioso para nuestra salud, pero una exposición prolongada o sin la protección adecuada puede provocar daños en las zonas del cuerpo más sensibles a la radiación UV del sol: la piel y los ojos.
El impacto de la radiación solar puede tener consecuencias negativas para nuestra salud visual. Por ello, debemos concienciarnos de que debemos proteger nuestros ojos del sol, especialmente durante los meses de verano, en los que la radiación solar es más intensa.
¿Cuáles son los efectos del sol en los ojos?
Una exposición al sol de forma prolongada y sin la protección adecuada puede provocar daños oculares severos como:
- Inflamaciones agudas de la conjuntiva (conjuntivitis) y en la córnea (queratitis).
- Lesiones en la superficie ocular como la pinguécula y el pterigion.
- Patologías degenerativas del ojo: cataratas, degenaración macular asociada a la edad (DMAE), etc.
- Retinopatías.
- Lesiones más graves como tumores palpebrales malignos o tumores de la conjuntiva como consecuencia del efecto acumulativo de la exposición a los rayos UV a lo largo de los años.
¿Cómo podemos proteger nuestros ojos del sol?
Para prevenir todas estas patologías nuestros oftalmólogos recomiendan:
- Usar gafas de sol homologadas con el marcado CE y con protección frente a los rayos UV-A, B y C (marcadas con el término UV 400). En la lente también debe indicar la categoría del filtro solar (1 al 4) según la cantidad de absorción lumínica visible (no radiación UV).
- En la elección de las gafas ten en cuenta el tipo de montura. Muchos modelos no impiden que los rayos del sol entren por los laterales y la parte superior e inferior de las gafas.
- Para obtener una mayor protección combina el uso de gafas con un sombrero.
- No te olvides de los más pequeños. Protege los ojos de tus hijos con gafas de sol envolventes y un sombrero.
- Evita la exposición al sol durante las horas de mayor incidencia (entre las 12:00 y las 16:00).
Proteger nuestros ojos del sol de forma adecuada es fundamental para nuestra salud visual. Y, ¡recuerda! Para el cuidado de tus ojos también es importante visitar de forma periódica al oftalmólogo para descartar cualquier problema visual.
Deja una respuesta