Las distrofias corneales son un grupo de trastornos oculares de origen genético y relativamente poco frecuentes. Se caracterizan por la acumulación anormal de material en una o más de las capas de la córnea (compuesta por cinto capas).
Las distrofias corneales afectan a ambos ojos, progresan lentamente y son hereditarias y pueden aparecer a cualquier edad.
Hay más de 20 tipos diferentes de distrofias corneales. Por lo general, éstas se agrupan en tres categorías, dependiendo de la parte de la córnea que es afectada:
- Las distrofias corneales anteriores o superficiales afectan las capas más externas de la córnea: el epitelio y la membrana de Bowman.
- Las distrofias corneales estromales afectan el estroma, la capa media más gruesa de la córnea.
- Las distrofias corneales posteriores afectan las partes más internas de la córnea: el endotelio y la membrana de Descemet.
Dependiendo el tipo de distrofia, algunas personas no presentan síntomas. En general, la acumulación de material hace que la córnea se haga opaca, causando una visión borrosa o incluso pérdida de visión. Muchas personas también experimentan erosión corneal, que causa un dolor en el ojo de leve a fuerte, sensibilidad a la luz y la sensación de tener un objeto extraño en el ojo.
Si una persona no ha presentado síntomas, un examen ocular de rutina puede revelar si existe algún tipo de distrofia corneal. En algunos casos, evaluaciones genéticas pueden identificar distrofias corneales. En caso de tener antecedentes familiares y sintomatología es recomendable indicarlo al oftalmólogo.
El tratamiento de las distrofias corneales depende del tipo de distrofia y la gravedad de los síntomas. Si aún no hay síntomas se pueden realizar seguimientos por parte del oftalmólogo. En los casos más graves se pueden realizar transplantes de córnea. Consulte con los especialistas de Oftalmocor en Córdoba para un asesoramiento especializado.